Si nuestra intención es visitar las playas de
Bélgica tenemos que dirigirnos a la provincia del Flandes Occidental, en la que
podemos encontrar algunos destinos bastante populares en la región como pueden
ser De Panne, Blankenberge o Nieuwpoort. Año tras año las blancas arenas de
estas playas, bañadas por el Mar del Norte, hacen las delicias de aquellos
turistas en busca de sol y relax.
DE PANNE
De Panne es un curioso pueblo turístico en la costa belga, ideal para pasar un día o bien un fin de semana. Se trata de la ciudad más occidental de Bélgica, y se halla entre la frontera francesa y el Mar del Norte. Se encuentra a tan sólo 45 minutos en coche del puerto francés de Calais, a través de la autopista A-16, a un día también de Inglaterra.
De Panne cuenta con
las playas más amplias de la costa belga, sus arenas son suaves, casi blancas,
y se prestan perfectamente para una amplia variedad de actividades, como tomar
el sol, pasear o jugar al voley-playa.
Un dato curioso es
que el primer yate de la historia se construyó en De Panne en 1898. Fue
fabricado por los Hermanos Dumont, y desde siempre el Campeonato Europeo de Regatas se
ha venido celebrando aquí.
Sus playas son de
pendiente suave, sin grandes caídas, las olas son perfectas para disfrutar de
un día de playa con los niños. También cuenta con un hermoso paseo marítimo
desde el que es posible disfrutar de unas magníficas vistas de la playa, dicho
paseo se halla bordeado de cafeterías, bares, tiendas y restaurantes.
QUÉ VISITAR
Al margen de sus bellas playas De Panne es un
lugar espléndido para disfrutar de algunos de los productos más típicos de la
gastronomía belga, como uno de sus dulces más famosos: los gofres. En De Panne se
pueden comprar en cualquier cafetería, restaurante, o vendedores ambulantes que
aparecen por la playa, aunque cabe advertir que se debe ir con cuidado de
mancharse, puesto que en verano los dulces se suelen derretir demasiado rápido.
Cerveza y patatas fritas son otros dos de los grandes elementos gastronómicos
de la cocina belga que disfrutar en De Panne.
EVOLUCIÓN DEL TURISMO
De Panne es quizá
uno de los destinos más atractivos de la costa de Bélgica, ello es debido principalmente
a su proximidad con la frontera francesa, lo cual la convierte en un punto de
interés y fácil acceso para los turistas del país galo. Además también resulta
muy fácil acceder a esta localidad a los visitantes del resto de Bélgica, así
como del resto de Europa, puesto que está directamente conectada con la
estación central de Bruselas, por lo que el acceso desde la capital resulta
sencillo.
BLANKENBERGE
La costa de
Blankenberge es característica y conocida por la mayoría de los habitantes de
Bélgica. Una gran fila de apartamentos cubre su paseo marítimo. No obstante, la
playa es lo suficientemente grande para poder disfrutar de ella en familia. Cabe
destacar que las arenas de las playas belgas suelen tener fama de ser las
mejores del mundo.
La playa cuenta con
3,3 kilómetros de largo, y consta con un dique cada 200 metros.
QUÉ VISITAR
Uno de los
elementos más emblemáticos de Blankenberge es el Pier, un puente de
350 metros de largo sobre el mar y construido en 1894. Fue demolido en 1914,
durante la Primera Guerra Mundial, aunque fue reconstruido entre 1931 y 1933,
convirtiéndose en el primer muelle de hierro fundido, posteriormente reforzado
con hormigón. Al final del muelle se halla el Pabellón donde podéis visitar
el Aquarama, una exposición sobre la fauna y la flora del Mar del
Norte.
Justo al lado de la
playa, casi directamente en el centro de Blankenberge, se halla el Casino,
en el mismo lugar donde el emperador francés Napoleón había construido una
fortaleza en 1810. Dicha fortaleza fue posteriormente demolida y reemplazada
por el primer casino. Esta sala de juegos se volvió a restaurar entre 1932 y
1935 y redecorada al estilo Art Deco. Por último, en 1991 todo el
complejo fue renovado con un estilo muy
contemporáneo.
En el lado
occidental de la playa se halla el puerto deportivo. Antiguamente solía ser un
puerto de pescadores. Durante el siglo XX, no obstante, el número de pescadores
disminuyó, fundamentalmente durante y después de la Segunda Guerra Mundial.
Tras ella, el puerto de pescadores se transformó en un nuevo puerto, donde
permanecen atracados unos 750 yates.
EVOLUCIÓN DEL TURISMO
Ya en el siglo
XVIII Blankenberge fue el lugar favorito para la gente de Brujas. Los primeros hoteles se
construyeron alrededor de 1850. Incluso en 1871 el gran Kaiser alemán llego
hasta la ciudad para relajarse tras la guerra contra Francia.
Actualmente sigue siendo
uno de los destinos favoritos para los veraneantes belgas, gracias sobretodo a
su fácil acceso y a sus atractivas características.
NIEUWPOORT
Durante los siglos IX y
X, a lo largo del estuario del Yser, se desarrolló un pequeño puerto, ciudad
fue fundada alrededor de este bajo el nombre de "Novus Portus" (Niewpoort).
A lo largo de los
siglos, fue adquiriendo una función comercial, a pesar de que se trataba sobre
todo de un puerto pesquero.
Los muchos asedios
sufridos por la ciudad no pudieron romper el espíritu Nieuwpoort, por el
contrario, permitieron que se levantara de sus cenizas más encantadora que
nunca, convirtiéndose en un resort de playa con una rica historia y un puerto seguro
para sus pescadores, para miles de deportistas y para todos sus huéspedes.
Gracias a su
favorable situación entre, por un lado el Mar del Norte y por otro lado el
interior con el río Yser, Niewpoort no es sólo un puerto deportivo para yates, también
cuenta con un pequeño puerto interior, especialmente equipado para un pequeñas
embarcaciones a motor en las vías navegables interiores. A través de los
sistemas de ríos y canales en la zona rural flamenca, es fácil llegar en barco
a las famosas ciudades históricas de Gante y Brujas por ejemplo.
QUÉ VISITAR
Niewpoort es el
destino ideal para todos los amantes de los deportes acuáticos. El mar
infinito, el puerto deportivo con su moderna infraestructura, así como el canal
ofrecerán un escenario ideal para casi todo tipo de deportes acuáticos: remo, natación,
hacer viajes en barco y vela, pescar, practicar “wavekarting” o hacer surf, todo
es posible.
Y Nieuwpoort tiene
aún más que ver con el agua. "Nieuwpoorts Zootje", "Dronken rog
a la Nieuwpoort” o "The Jeanne Panne-Menu" son sólo tres ejemplos de
deliciosos platos preparados con mariscos frescos todos los días. El marisco
fresco está a la orden del día en Nieuwpoort.
Una ciudad
histórica en combinación con una gran playa de arena, un régimen de Alojamiento
de primera clase y excelentes restaurantes, eso es lo que Nieuwpoort ofrece a
sus visitantes.
EVOLUCIÓN DEL TURISMO
Sin embargo, la
creciente popularidad de los deportes acuáticos a partir de la década de 1960
abrió nuevas perspectivas para el puerto Niewpoort. El puerto deportivo abrió
sus puertas en 1895 con 350 plazas de amarre. Fue ampliado en 1969 con 300 plazas
más. Y ya en 1979, el Novus Portus, una nuevo muelle de 12,9 hectáreas con capacidad para 1500 embarcaciones
de recreo, estaba listo para su uso. A día de hoy el puerto deportivo de Nieuwpoort
se ha convertido en el más grande de la costa del norte de Europa.
En los próximos
diez años, el Puerto deportivo existente se ampliará con otros 800 amarres, de
modo que la capacidad total llegará a más de 3000 barcos.
¿Te has quedado con ganas de más? Quizá te interese conocer las playas de Alemania, Francia o Inglaterra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario